Rescatando versiones, entre las más divulgadas y respetadas, por lo menos aquí en latinoamérica, tenemos la de Reina Valera, en donde podemos leer el siguiente fragmento del libro de Ezequiel:
1 Y FUÉ que a los treinta años, en el mes cuarto, a cinco del mes, estando yo en medio de los trasportados junto al río de Chebar, los cielos se abrieron, y vi visiones de Dios. 2 A los cinco del mes, que fué en el quinto año de la transmigración del rey Joaquín, 3 Fué palabra de Jehová a Ezequiel sacerdote, hijo de Buzi, en la tierra de los Caldeos, junto al río de Chebar; fué allí sobre él la mano de Jehová. 4 Y miré, y he aquí un viento tempestuoso venía del aquilón, una gran nube, con un fuego envolvente, y en derredor suyo un resplandor, y en medio del fuego una cosa que parecía como de ámbar, 5 Y en medio de ella, figura de cuatro animales. Y este era su parecer; había en ellos semejanza de hombre. 6 Y cada uno tenía cuatro rostros, y cuatro alas.
A continuación, una versión católica de la Sagrada Biblia:
1 En el trigésimo, en el mes cuarto, a cinco del mes, sucedió que estando yo en medio de los cautivos junto al río Chobar, se me abrieron los cielos, y tuve visiones divinas o extraordinarias.2 A cinco del mes, en el quinto año después de haber sido trasladado a Babilonia el rey Joaquín, o Jeconías,
3 dirigió el Señor su palabra a Ezequiel sacerdote, hijo de Buzi, en la tierra de los caldeos, junto al río Chobar; y allí se hizo sentir sobre él la mano o virtud de Dios.
4 Y miré, y he aquí que venía del Norte un torbellino de viento, y una gran nube, y un fuego que se revolvía dentro de la nube, y un resplandor alrededor de ella; y en su centro, esto es, en medio del fuego, una imagen de un personaje, tan brillante como de ámbar. (En la misma biblia hace referencia del ámbar, que en la voz hebrea denota, una especie de metal muy precioso, sumamente brillante, y más estimado que el oro. Otros traducen como electro, al ámbar)
5 Y en medio de aquel fuego se veía una semejanza de cuatro animales (en el glosario inferior de la biblia: dice una semejanza, porque no eran realmente animales, sino cuatro nobilísimos espíritus; y solamente para denotar algunas de sus cualidades se comparan en cierta manera con algunos animales muy conocidos por su fuerza, ligereza, etc., aunque no tuviesen la misma figura de dichos animales.); la apariencia de los cuales era la siguiente: había en ellos algo que se parecía al hombre;
6 cada uno tenía cuatro caras, y cuatro alas.
En ambas versiones la historia es la misma, con alguna que otra pequeña diferencia. En este fragmento vemos como Ezequiel describe una aparición sobrenatural, que teniendo en cuenta que antes, nunca nada igual fue visto, entonces era muy difícil compararlo con algo que estuviese sobre la tierra, y el resultado era el ya leído, una inentendible y confusa comparación. A pesar de ello, podemos notar un tono Ovni a todo este asunto, ya que en el momento en que compara lo que estaba viendo con el ámbar, este metal precioso, nos damos levemente cuenta de que se trataba de una especie de vehículo, el cual transportaba a estos seres, semejantes al hombre.
Muchas webs publican la supuesta forma que podrían tener estos vehículos y los seres mismos, basándose nada más en el capítulo 1 del libro de Ezequiel. ¿Naves extraterrestres? ¿Seres de otros mundos o dimensiones?
En la descripción que hace el sacerdote Ezequiel, sólo nombra círculos, ruedas, esferas, luces, rayos, relámpagos, materias vistas como del color del mar, lo cual no nos da una perspectiva correcta del suceso. Lo único más llamativo dentro de todo es que estos móviles seguían a los seres en todo momento, ya sea a lado suyo, o detrás de ellos y tenían un considerable tamaño que causaba espanto al verlas.
Así tenemos un misterioso acontecimiento dentro de la Biblia, que no puede ser explicado por cualquiera, ni interpretado por científicos, ya que la visión y entendimiento de este libro sagrado sólo esta preparado para algunos pocos, quienes posean la mente abierta a la sabiduría del universo.